Hace apenas un par de meses que inicié mi carrera dentro del Servicio Exterior Mexicano; eso me emociona y me llena de orgullo, porque la verdad fue un proceso bastante complicado. Me emociona porque es una carrera que (espero) me permitirá conocer muchas cosas del mundo en que vivimos, culturas diferentes y personas muy interesantes.
Pero a la vez que es una carrera interesante, es pertenecer a un cuerpo de carrera muy jerarquizado y que conserva formas que para la mayoría de la gente ya no tendrían razón de ser. Entiendo que es importante la estructura, pues es la manera de organizarse más adecuadamente, pero eso en ocasiones lleva a situaciones que, la verdad, me parecen exageradas.
Y es que ¡úchala mano! El otro día tuve una plática con un compañero del servicio y estaba molesto porque en algún momento en su acreditación ante un gobierno extranjero no pusieron su rango correcto; tal vez la molestia habría sido justificada si dicho error conllevara algún perjuicio práctico (por ejemplo que no tuviera las inmunidades que le correspondían o que sus percepciones económicas fueran a ser aceptadas), pero no, simplemente era porque pues el tenía un rango determinado y no el que le habían puesto y pues ¡cómo iba a ser posible!
En fin, visto lo anterior, hoy me propongo algo (espero que no sea nada más porque actualmente pertenezco al rango más bajo que hay): los únicos títulos que me importará ganar y merecer de aquí en adelante y por los que sí querré ser reconocido son por el de amigo, hijo, hermano y, espero más adelante, los de esposo y padre. Si además se le puede agregar el adjetivo "bueno" a esos títulos, podré darme por satisfecho en la vida.
Salú!
jueves, mayo 13, 2010
sábado, mayo 08, 2010
Semanitas de locura y dos viajes muy chidos
Pues nada, ahora sí que me he tardado muchísimo en escribir y no crean que porque ya no me acuerdo de ustedes, al contrario, pero es que los dos fines de semana pasados fueron súper movidos, intensos y muy padres y las semanitas intermedias bastante azarosas, complicadas y de repente irritantes y pues me han traído medio con bastante chamba en la embajada y luego en casa el internet que tengo no es lo mejor que esperaría (ya voy a pedir más velocidad pa poder disfrutarlo más).
En fin, les platico que tuvimos el día de mi último mensaje rollísitco, la inauguración de una exposición organizada por la embajada, es la obra de dos pintores oaxaqueños, Amador Montes (http://amadormontes.com/) y Alberto Aragón (http://www.aarago.net/) en un Museo que se llama Forma, es más bien una galería, no muy grande, como estilo casa de la Col. Roma, muy linda, estuvo el Secretario de Cultura de El Salvador y, considerando que la obra llegó 3 horas antes de la inauguración y que el nuevo Agregado Cultural llegó 3 horas antes que las obras y que el cuate nada más tuvo tiempo de botar sus cosas en el hotel y ponerse a trabajar, la verdad salió muy bien el evento, habló la directora del museo, el embajador y el secretario de cultura y ps ya, la obra de Amador Montes me gustó, pero ahorita no tengo 4500 dólares para invertir en un cuadrito (aunque no me parece muy cara).
El viernes de esa semana, pasó el atentado contra Guillermo Medina, del que les comenté en un mensaje fuera de la serie de mis reportes y pues yo pensé que no iba a poder hacer mi viaje a México, que era ese mismo viernes, de hecho, cuando ya me retiré de la Embajada e iba camino al aeropuerto, me habló el Embajador (¡Dios mío! -pensé- ya me va a decir que me regrese), pero era para echarme la bendición y despedirse y desearme buen viaje, porque ya no nos habíamos despedido en vivo porque pues obvio él estaba con 3 personas en su oficina y 200 en los teléfonos; la verdad se me hizo un muy buen detalle, en medio de todo el relajo en el que estaba, acordarse de mi para desearme buen viaje.
En todo caso, pues me fui a México el viernes 23 y llegué allá casi a las 6, en lo que salía el equipaje y todo y pues como la mayoría ya sabe, me fuie increíble, me encantó compartir el momento con quienes lo pude hacer (obvio mi pa y mis hermanos; chavos de la Sta Cruz y Lety, gracias)., me hubiera encantado poder verlos a todos, pero ps el sábado tuve maratón de bodas de dos parejas maravillosas, y en una de las cuales tuve el privilegio de participar como padrino de lazo (se me quedó la corbata bugambilia en México!!! le pediré a mi papá que me la traiga)... chavos los quiero muchísimo y sé que van a ser ejemplo de familias en donde el amor de Dios estará en medio de ustedes. El domingo, después de un sábado sin parar, tenía que llegar a docuemtnar equipaje a las 9 am y ps ahí tuve oportunidad de desayunar con mi papá y algunos de mis hermanos y pues otra vez a despedirse.
Llegué acá el domingo a la 1 y me sentia morir, con fiebre, todo el cuerpo torcido y pa acabarla de fregar, deprimido, peeero, como dicen los estadounidenses del showbiz: "the show must go on".
La siguiente semana fue bastante ajetreada, con gente de la interpol teniendo reuniones aquí y pues hubo que hacer la repatriación del cadaver de la esposa muerta y de los hijos, todo el mundo andaba super estresado, en fin, no tuve tiempo de hacer absolutamente nada, pero el fin siguiente, agarré mis tiliches y me fui a Guatemala con mis buenos amigos Luis (que está en Guate) y Aída (que está en Tecún Umán) y la pasé increíble, fuimos a Antigua, es una ciudad colonial súper bonita, bastante fresca, lo cual agradecimos Aída y yo (verdad Aída) que normalmente aguantamos mucho calor, vimos las construcciones, entramos a las iglesias, comimos en un restaurane súper bonito, tomamos chocolate en agua delicioso (Luis café) y medio vaciamos el mercado de artesanías (bueno, Aída lo hizo, yo nomás ayudé a cargar), regresamos luego a la ciudad de Guatemala, es más grande (y creo que más bonita) que San Salvador y nos fuimos a terminar el día en el depa de Luis, con vino tinto y escandalizando a la gente (no sé qué tanto ruido pueden hacer tres pelados cantando en el balcón, pero pues alguien se quejó jejeje).
El domingo desayunamos en un restaurante súper agradable y super rico, luego fuimos al centro de Guate que está simpático y muy clasico (catedral de un lado, palacio de gobierno de otro, portales en otro, parquecito en medio) y luego a un museo en un centro comercial, con animales y piezas arqueológicas, lo interesante del caso es que estaba bajo o dentro de un montículo de los mayas, como una cámara sepulcral o algo así, eso sí, súper moderno, con suficiente información, pero sin ser demasiada que canse. Ya para ese momento llegó de nuevo el momento tan temido, hora de despedirse nuevamente, fuimos a dejar a Aída primero al lugar de donde salía su autobús y luego que llamaron para su corrida, ahora una corrida a llevarme a mí al lugar de donde salía el mío. La verdad un excelente servicio en el autobús, hasta copita de baileys me dieron al final y pasaron una película (desde mi cielo) que me impactó y de la que ya les contaré luego.
Y pues llegamos a esta semana, en la cual fue mi turno de ponerme todo loco, porque me quitaron a mi secretaria y ahora se supone que la chica de la recepción me echa la mano (y es lista y súper movida, pero ps también tiene que atender el conmutador y la puerta y ps le tengo que explicar el sistema y todo) y me tocaba cerrar la contabilidad del mes, lo cual me tuvo muy estresado, pero ps creo que ya quedó y ya vamos agarrando ritmo.
Ayer fuimos al Sheraton, donde nos prepararon un salón con banderas de México, sombreros de charro y cuanta cosa pa que fueramos a ver el partido VS Ecuador los de la Embajada... decepcionante partido, pero pasamos un buen ratio.
Voy llegando de una muy divertida clase de francés y estoy en la embajada porque vinieron a limpiar la cisterna (que yo creo que nunca la habían limpiado) y ps están vaciando lo que le quedaba de agua y ya me aburrí mucho y tengo hambre, veré si pido que me traigan algo de comer.
Como dicen los salvadoreños: Salú!
Toño
En fin, les platico que tuvimos el día de mi último mensaje rollísitco, la inauguración de una exposición organizada por la embajada, es la obra de dos pintores oaxaqueños, Amador Montes (http://amadormontes.com/) y Alberto Aragón (http://www.aarago.net/) en un Museo que se llama Forma, es más bien una galería, no muy grande, como estilo casa de la Col. Roma, muy linda, estuvo el Secretario de Cultura de El Salvador y, considerando que la obra llegó 3 horas antes de la inauguración y que el nuevo Agregado Cultural llegó 3 horas antes que las obras y que el cuate nada más tuvo tiempo de botar sus cosas en el hotel y ponerse a trabajar, la verdad salió muy bien el evento, habló la directora del museo, el embajador y el secretario de cultura y ps ya, la obra de Amador Montes me gustó, pero ahorita no tengo 4500 dólares para invertir en un cuadrito (aunque no me parece muy cara).
El viernes de esa semana, pasó el atentado contra Guillermo Medina, del que les comenté en un mensaje fuera de la serie de mis reportes y pues yo pensé que no iba a poder hacer mi viaje a México, que era ese mismo viernes, de hecho, cuando ya me retiré de la Embajada e iba camino al aeropuerto, me habló el Embajador (¡Dios mío! -pensé- ya me va a decir que me regrese), pero era para echarme la bendición y despedirse y desearme buen viaje, porque ya no nos habíamos despedido en vivo porque pues obvio él estaba con 3 personas en su oficina y 200 en los teléfonos; la verdad se me hizo un muy buen detalle, en medio de todo el relajo en el que estaba, acordarse de mi para desearme buen viaje.
En todo caso, pues me fui a México el viernes 23 y llegué allá casi a las 6, en lo que salía el equipaje y todo y pues como la mayoría ya sabe, me fuie increíble, me encantó compartir el momento con quienes lo pude hacer (obvio mi pa y mis hermanos; chavos de la Sta Cruz y Lety, gracias)., me hubiera encantado poder verlos a todos, pero ps el sábado tuve maratón de bodas de dos parejas maravillosas, y en una de las cuales tuve el privilegio de participar como padrino de lazo (se me quedó la corbata bugambilia en México!!! le pediré a mi papá que me la traiga)... chavos los quiero muchísimo y sé que van a ser ejemplo de familias en donde el amor de Dios estará en medio de ustedes. El domingo, después de un sábado sin parar, tenía que llegar a docuemtnar equipaje a las 9 am y ps ahí tuve oportunidad de desayunar con mi papá y algunos de mis hermanos y pues otra vez a despedirse.
Llegué acá el domingo a la 1 y me sentia morir, con fiebre, todo el cuerpo torcido y pa acabarla de fregar, deprimido, peeero, como dicen los estadounidenses del showbiz: "the show must go on".
La siguiente semana fue bastante ajetreada, con gente de la interpol teniendo reuniones aquí y pues hubo que hacer la repatriación del cadaver de la esposa muerta y de los hijos, todo el mundo andaba super estresado, en fin, no tuve tiempo de hacer absolutamente nada, pero el fin siguiente, agarré mis tiliches y me fui a Guatemala con mis buenos amigos Luis (que está en Guate) y Aída (que está en Tecún Umán) y la pasé increíble, fuimos a Antigua, es una ciudad colonial súper bonita, bastante fresca, lo cual agradecimos Aída y yo (verdad Aída) que normalmente aguantamos mucho calor, vimos las construcciones, entramos a las iglesias, comimos en un restaurane súper bonito, tomamos chocolate en agua delicioso (Luis café) y medio vaciamos el mercado de artesanías (bueno, Aída lo hizo, yo nomás ayudé a cargar), regresamos luego a la ciudad de Guatemala, es más grande (y creo que más bonita) que San Salvador y nos fuimos a terminar el día en el depa de Luis, con vino tinto y escandalizando a la gente (no sé qué tanto ruido pueden hacer tres pelados cantando en el balcón, pero pues alguien se quejó jejeje).
El domingo desayunamos en un restaurante súper agradable y super rico, luego fuimos al centro de Guate que está simpático y muy clasico (catedral de un lado, palacio de gobierno de otro, portales en otro, parquecito en medio) y luego a un museo en un centro comercial, con animales y piezas arqueológicas, lo interesante del caso es que estaba bajo o dentro de un montículo de los mayas, como una cámara sepulcral o algo así, eso sí, súper moderno, con suficiente información, pero sin ser demasiada que canse. Ya para ese momento llegó de nuevo el momento tan temido, hora de despedirse nuevamente, fuimos a dejar a Aída primero al lugar de donde salía su autobús y luego que llamaron para su corrida, ahora una corrida a llevarme a mí al lugar de donde salía el mío. La verdad un excelente servicio en el autobús, hasta copita de baileys me dieron al final y pasaron una película (desde mi cielo) que me impactó y de la que ya les contaré luego.
Y pues llegamos a esta semana, en la cual fue mi turno de ponerme todo loco, porque me quitaron a mi secretaria y ahora se supone que la chica de la recepción me echa la mano (y es lista y súper movida, pero ps también tiene que atender el conmutador y la puerta y ps le tengo que explicar el sistema y todo) y me tocaba cerrar la contabilidad del mes, lo cual me tuvo muy estresado, pero ps creo que ya quedó y ya vamos agarrando ritmo.
Ayer fuimos al Sheraton, donde nos prepararon un salón con banderas de México, sombreros de charro y cuanta cosa pa que fueramos a ver el partido VS Ecuador los de la Embajada... decepcionante partido, pero pasamos un buen ratio.
Voy llegando de una muy divertida clase de francés y estoy en la embajada porque vinieron a limpiar la cisterna (que yo creo que nunca la habían limpiado) y ps están vaciando lo que le quedaba de agua y ya me aburrí mucho y tengo hambre, veré si pido que me traigan algo de comer.
Como dicen los salvadoreños: Salú!
Toño
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